Contraje Hep-C muy probablemente por el uso de drogas por vía intravenosa en algún momento de mis veinte años.
Había pensado que la lejía acabaría con el virus y cuando me dijeron que no, supuse que
lo tuve. Fue en ese momento (sin juego de palabras) que me volví aún más imprudente. Si no hubiera cogido'
antes, definitivamente lo hice entonces.

No me diagnosticaron oficialmente hasta que descubrí que estaba embarazada. Sentí mucha más vergüenza
al respecto en esta época. Constantemente preocupado por pasarlo. Siempre sintiéndome como si la gente fuera
juzgándome, esta futura mamá con este virus estigmatizado que estampa "drogadicta" en tu
frente injustamente. Afortunadamente, mi médico obstetra y ginecólogo fue absolutamente increíble. Ella se dirigió a mi
preocupaciones y nunca me hizo sentir menos que y estábamos en la misma página de entregar un
bebe sano

Recibí tratamiento al año siguiente de dar a luz a mi hija, quien afortunadamente
no contrajo hepatitis C. Sabiendo que solo había una pequeña posibilidad de que sucediera definitivamente
aliviaba las ansiedades. El trato fue realmente duro. Tenía la cepa mutante que requería interferón en
el momento de matarlo. Estaba tan enferma como puede estarlo, y terriblemente deprimida. La parte más difícil fue
tener el seguro cortado a la mitad del tratamiento. Había cumplido 26 años, acababa de tener un bebé, comencé una nueva
trabajo y a la mitad de un tratamiento intensivo.

Terminé pagando de mi bolsillo y terminándolo. No creo que AHCCCS lo cubriera entonces.
Creo que hoy en día las personas tienen aún más posibilidades de recibir un tratamiento mucho menos severo.
regimiento de medicamentos. Si pasara algo y lo volviera a contraer, no estaría tan
vacilante sabiendo lo que sé ahora. Encontraría un proveedor y me haría la prueba regularmente y entraría en
tratamiento lo antes posible para no tener que preocuparme más. tenia mucha mas energia
cuando todo estuvo dicho y hecho. Espero que más personas entren en tratamiento y ese conocimiento
sigue propagándose para detener el estigma.